En Aikido se busca utilizar la fuerza del oponente para desarmarlo, en vez de la propia fuerza. Para esto, cada técnica permite guiar la dirección, y el Iriminage (lanzamiento de entrada) utiliza la fuerza del agarre de muñeca inicial, para luego hacer uso de la fuerza de levantamiento del oponente y así moverlo en la dirección contraria, para finalmente lanzarlo al suelo.
Se parte cuando el contrario realiza un agarre de cruz (Hanmi Katate Dori) en la muñeca.
Se debe buscar evitar la mano a toda costa, así que, sin forzar, debes desplazarte hacia el lado. Pones la otra mano sobre el cuello del oponente.
Se busca ubicarse detrás del oponente, y cargar el peso del cuerpo en la mano que pones sobre el cuello, para guiarlo con uno y llevarlo al suelo.
Ya desestabilizado, podemos levantar al oponente con el brazo del cual está tomado, llevándolo en la dirección de la cual veníamos.
Detrás del oponente, guíalo hacia atrás con una media vuelta para dejarlo caer en el suelo.